ALEGRIA EN EL ALMA

De nuevo en casa con el alta hospitalaria, viene a verme un amigo que me saluda así. “Chico te veo un aspecto estupendo.” Le contesto. - Noo, si yo de carrocería estoy muy bien, a mí, lo que me falla es el motor, que nunca paso la ITP (Inspección Técnica de Personas) y me tienen que mandar al taller de reparaciones de 8 a 10 días-

Mi amigo sonríe y me dice: “Juan, a mi me tienes hecho un lio; resulta, que de un tiempo a esta parte, como media tienes dos ingresos en el hospital al año, este año, ya llevas 4 ingresos, tomas un montón de pastillas, hasta para mear tienes que tomar pastillas, sin embargo, siempre estas de buen humor, muy alegre, ¿lo finges, o es que de verdad estas alegre?” (más o menos esta fueron sus palabras, no las gravé)

Le contesto.- Vamos a ver, me produce una gran alegría cada día que el Señor me regala, y como puedes comprender, un regalo así no se puede desperdiciar con malos humores, quejándote todo el día amargando a los que te rodean y a ti mismo, hay que vivirlo con intensidad con alegría, como un niño vive los primeros momentos de su regalo de Reyes.

Es para mí motivo de alegría el que cuando me duele algo, hay un médico que me receta las pastillas que debo tomar y, las tomo, impidiendo que el dolor físico cierre las puertas para que entre en el alma inundándola ¡la alegría de vivir! Es motivo de alegría el que cuando mi salud lo requiere me ingresan en el Hospital de Fuenlabrada (cerquita de casa) en donde recibo una atención científica, humana y espiritual, de primerísima calidad.

Estoy contento y alegre por los padres que el Señor me dio, como ellos puede que haya muchos en el mundo, mejores, ¡ninguno!

Estoy contento por mis hermanos, sobrinos y sobrinas.

Estoy contento y alegre por mis 6 nietos, y por los 3 que me traerán los Reyes en el próximo enero, dos me los traen de Rusia, son hermanitos, el chico Cosntan tiene 5 años y la niña Margarita tiene 2, ¡ya los queremos! El otro es producto nacional, fabricación casera.

Estoy contento, muy alegre y agradecido por mis 5 hijos, por mis yernos y nueras, que son estupendos.

Estoy muy contento y agradecido al Señor que en el año 1963 cruzo en mi camino a mi deliciosa contraria (incluso cuando se enfada) mi mujer, responsable de todos estos motivos de alegría

Pero hoy mi emocionada alegría se llama ¡Elena! Mi nieta, de 10años, su profesora encargó a su clase un ejercicio de redacción dejando libre el tema, y mi nieta escogió y escribió esto:

MIS ABUELOS.

Un abuelo es una maravilla, al igual que una abuela, son el sueño hecho realidad. Un abuelo es un Cuentacuentos, dice siempre cosas muy interesantes, ni los padres pueden superarlo.

Una abuela es la reina de las cocinas, ni el mejor cocinero la superaría.

Con ellos siempre te ríes y les puedes confiar cualquier secreto, porque ellos no cuentan nada.

Si pudiera pedir un deseo, desearía que todos tuvieran un abuelo o una abuela porque quien los tiene, tiene la felicidad.

Los abuelos se sacrifican por nosotros, cuando estamos solos, ellos siempre están allí para animarte. Cuando papá y mamá están malos nos cuidan y cuando estamos malos nos curan ¡ni el mejor médico nos cura tan bien!

Los abuelos siempre nos dan caprichos, no importan lo que cuesten, lo que les importa es vernos felices. Nos enseñan muchas cosas de Jesús y nos dan consejos para ser como Él.

Los abuelos te cuentan cómo eran de pequeños. De mayor quiero ser como ellos, tan sinceros y buenos como nadie.

Los abuelos han hecho mucho por nosotros, ahora yo quiero hacer algo por ellos ¡¡GRACIAS A TODOS LOS ABUELOS!!

Amigo que me honras leyendo estos reglones, te confieso que he tenido que secarme los ojos para no mojar el teclado, es el alma que henchida de emoción y alegría lo manifiesta asomándose por la ventana de los ojos

Hasta otro día si Dios quiere.