Buenos días a tod@s:
Soy Amparo, la hija pequeña de Juan, y lamento tener que deciros que el abuelito... está malito en el hospital.
Está bastante fastidiado, esta vez está costando mucho... ha cogido un "bichito" en el último ingreso en el hospital bastante puñetero... y ya sabemos que los "bichitos residentes" (en el hospital) son bastante malos.
Y doy fe que es cierto lo que explica en la última entrada, "Alegría en el alma", porque estando tan fastidiado, que apenas puede hablar del agotamiento, la fuerza de su aliento la emplea para transmitirnos tranquilidad y alegría, y nos pregunta como están sus chicos (sus nietos), y su cara cambia cuando le empezamos a contar las cosas que han hecho juntos...
Mi madre, su compañera de vida y su enfermera jefe, al pie del cañón casi las 24 horas del día, cogidita de su mano sin moverse de su lado. Casi hay que obligarla a comer y a irse a casa a dormir, porque nos preocupa que también caiga enferma de agotamiento. Y es que hemos descubierto que aunque parecía una heroína venida del planeta donde se forjan a los seres más fuertes que puedas imaginar, nuestra madre es humana. Por la noche estamos sus yernos, nueras e hij@s.
Yo no puedo estar más de acuerdo con mi padre cuando dice en su última entrada:"Estoy contento y alegre por los padres que el Señor me dio, como ellos puede que haya muchos en el mundo, mejores, ¡ninguno!". Nos ha pasado lo mismo a los dos...
En su nombre, gracias por vuestras oraciones para su pronta recuperación. Es muy probable que entre todos, Dios nos oiga y nos regale más y mejor tiempo con él.
Espero que pronto sea él quién os informe de su estado. Sino, os informaré de cuando en cuando.
Un saludo a tod@s.
Amparo.